Le robaron la moto al actor “Huevo” Müller pese a luchar contra los ladrones.

En el corazón de Pontevedra, partido de Merlo, una tarde que prometía ser tranquila se vio empañada por un violento suceso que afectó al conocido actor Alejandro “Huevo” Müller. Dos motochorros, con la audacia propia de quien se mueve por pasajes en sombra, arremetieron contra él apenas este se adentró en el entramado del barrio, intentando proteger lo que legítimamente le pertenece.

El escenario de este dramático evento fue la intersección de las calles Alfonsín y Ayacucho. En ese cruce, el actor, a bordo de su preciada Kawasaki 650 negra, fue sorprendido por dos individuos en una moto Corven 110 negra, libre de patente. Sin más rodeos, lo embistieron, desatando así un caótico enfrentamiento.

Con el arrojo de un porteño curtido, Müller se enfrascó en una lucha cuerpo a cuerpo con uno de los delincuentes, resultando con una herida menor en su rostro, marcas de una defensa con la que intentó preservar no solo el vehículo, sino quizás también un poco de dignidad en una sociedad que a menudo enfrenta estos trances.

Sin embargo, y pese a la resistencia, uno de los asaltantes logró huir con la moto de Müller. El otro, no tuvo la misma suerte. La comunidad, en un acto de solidaridad y valentía, lo redujo hasta que llegó la Policía Bonaerense para concretar la captura de Gonzalo Uriel Angulo, un joven de apenas 19 años.

La captura y el proceso judicial recaen ahora en la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº4 del Departamento Judicial de Morón, donde el caso se tramita bajo la calificación de robo.

En sus propias palabras, el actor compartió con A24 el timorato temor disfrazado de valor que sintió durante el altercado: “Vi que no tenía arma… Nos empezamos a pelear”, confesó, lamentando que su reacción pudiera haber tenido otro desenlace de ser diferente la circunstancia.

Müller concluyó con una reflexión que bien resume el dilema de muchos argentinos frente al delito: “No hay que hacer eso. Es una locura lo que hice.”, expresó, evidenciando la lucha interna entre la reacción instintiva y el peligro latente.

Este suceso recuerda al experimentado por un oficial de la Policía de la Ciudad de Merlo. Una gresca violenta, con otra amenaza de arma de fuego, terminó en un intercambio de disparos que dejó al agente herido, aunque con fortuna, no de gravedad.

Estos eventos plantean un claro llamado de atención a las autoridades sobre la persistente inseguridad que permea las calles de nuestra querida Argentina. Un complejo entramado que demanda soluciones urgentes para garantizar el bienestar y la seguridad de los ciudadanos.